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Gallardo y Arruabarrena encabezan la nueva generación de técnicos en el fútbol argentino

Tiempos de cambio

La liga argentina vive un proceso de renovación en el banco de los suplentes: técnicos jóvenes con propuestas audaces y ofensivas, un significativo cambio en relación a los últimos años donde imperaron los entrenadores especuladores y defensivos, más preocupados por mantener el cero en arco propio que por lograr vulnerar la valla rival.

Por Francisco Villanueva

Twitter: @franvillanueva_

Publicado: 2014-10-21

Los últimos años del fútbol argentino han acostumbrado al espectador a partidos cerrados, con muy pocos goles. Las propuestas de los directores técnicos tienen mucho que ver en esto. Pep Guardiola dice que "no hay entrenadores buenos y malos, sino valientes y asustados". Siguiendo esta línea, en Argentina solía haber muchísimos más de los segundos que de los primeros. Quizás por la manera en que se vive el fútbol en el país de Messi, donde abundan el exitismo y es muy difícil consolidar proyectos a largo plazo.

En Abril de este año, la Asociación del Fútbol Argentino aprobó un nuevo torneo que comenzará a disputarse a partir del 2015. El mismo estará conformado por 30 equipos que jugaran todos contra todos a una sola rueda. En la actualidad, la primera división cuenta con  20 equipos, por lo que en esta segunda mitad del 2014 el torneo de la B Nacional (segunda división) otorgará 10 ascensos. Esto implica que en primera, el torneo que se viene disputando no tenga descensos, por lo que, de alguna manera, los equipos no tienen nada que perder. De ahí viene el nombre de torneo de "transición".

Esta decisión de la AFA le ha abierto las puertas a técnicos con propuestas más arriesgadas y ofensivas, que también tienden a apostar por los chicos de inferiores. Casualidad o causalidad, estos entrenadores, en su mayoría, son considerados jóvenes en el mundo de los banquillos, algo que promete de cara a futuro. En la actualidad, el DT más longevo es Miguel Ángel Russo, con 58 años. Lo siguen Bauza con 56, Zielinski con 54, Perazzo y Alfaro con 52, Troglio y Mayor con 49, Sensini con 47, Franco con 45, Almirón y Flores con 43, Pellegrino y Raggio con 42, Cocca y Schelotto con 41, Quattrocchi, Palermo y Almeyda con 40 y, lo más novedoso, los dos más jóvenes son los encargados de comandar a los equipos más populares del país: Arruabarrena con 39 años y Gallardo con 38 son los más "chiquitos". Esto da un promedio de edad de 45 años aproximadamente.

Pero esto, en si, no es más que un simple dato estadístico. Lo más interesante es lo que se ha podido apreciar en el verde césped: equipos que buscan el protagonismo de los partidos, cuya premisa es intentar vulnerar el arco rival antes de defender el propio, lo que da lugar a partidos abiertos, más atractivos y con más goles. Claro que esta descripción no corresponde a todos los equipos, y no siempre sucede así: tantos años priorizando el fútbol defensivo y especulativo generan que esa manera de jugar se interiorice tanto en el espectador como en los protagonistas del espectáculo, por lo que la descontaminación puede llevar un largo tiempo.

Habrá que esperar hasta el comienzo del nuevo formato de 30 equipos para ver si, con la tabla de los promedios en acción, se sigue por esta misma línea de juego o, por el contrario, el miedo a la derrota, y en algunos casos al descenso, inhibe tanto a los entrenadores como a los jugadores provocando el retorno a las viejas costumbres. Por el momento, el presente torneo de la primera división del fútbol argentino es uno de los más atractivos que se han podido ver en los últimos tiempos. Claro que se está muy lejos del nivel de juego que exhiben las grandes ligas de Europa, pero se esta yendo por el buen camino. El tiempo nos dará la respuesta.


Escrito por

Francisco Villanueva

18 años, de Argentina. Estudiante de Periodismo Deportivo. Sueño con poder vivir de esta profesión, siempre manteniendo los mismos valores. Mi frase de cabecera: Lo importante es el camino.


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